¿Por qué es tan importante incluir la leche fermentada a tu dieta?
Si buscas mejorar tu digestión y equilibrar la flora intestinal puedes pensar en incluir la leche fermentada a tu dieta.
La ciencia demostró que estos beneficios para el consumidor son atribuidos a la presencia de componentes conocidos como bioactivos. | Pixabay.
Estas te ayudan a optimizar la capacidad de hidrolizar lactosa, coadyuvando a contrarrestar el efecto causado por diarreas.
La leche cuando se fermenta se produce como el resultado de la fermentación de la lactosa de la leche.
Por acción de las bacterias, el ácido láctico provoca un decremento del pH, aumento en acidez y la desnaturalización de sus proteínas para su posterior coagulación.
Algunos reportes de la ciencia indican que la leche fermentada es una excelente alternativa medicina contra enfermedades gastrointestinales.
Estas contienen algunos componentes que se asocian a efectos antiinflamatorios, pero se desconocía por qué su consumo ayudaba a mejorar la salud de las personas que padecían enfermedades gastrointestinales. Algunas de estas leches son yogurt, kefir, leche kumis y ácida.
La ciencia demostró que estos beneficios para el consumidor son atribuidos a la presencia de componentes conocidos como bioactivos.
Uno de los principales componentes que se han estudiado en las leches fermentadas son los péptidos, los cuales son liberados a partir de la hidrólisis de las proteínas.
Otros componentes son el ácido linoleico, el ácido láctico, vitaminas del grupo B y exopolisacáridos, los cuales, proveen características sensoriales que acentúan las notas de sabor, aroma y textura.
El Grupo de Investigación en Biotecnología de Fermentaciones Lácticas, conformado por especialistas del Laboratorio de Química y Biotecnología de Productos Lácteos y el Laboratorio de Inmunología del CIAD, está trabajando para conocer los componentes presentes en las leches fermentadas que podrían jugar un papel importante para el efecto antiinflamatorio intestinal.
Cuenta con el apoyo del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) en la convocatoria de Ciencia Básica (Fondo Sectorial de Investigación para la Educación) 2017-2018 (Proyecto A1-S-53161).
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