Descubren cómo actúa el cerebro durante la muerte y lo prueban en paciente de 87 años
Un estudio publicado en Frontiers descubrieron patrones rítmicos de ondas cerebrales alrededor del momento de la muerte.
La nota publicada el pasado 22 de febrero en el Blog de la revista Frontiers Science News se refirió a que durante un estudio realizado a un paciente de 87 años de edad que sufrió epilepsia y lamentablemente falleció pudieron observar cómo se comportaba su cerebro.
El doctor Raul Vicente de la Universidad de Tartu, Estonia y sus colegas utilizaron electroencefalografía (EEG) de forma continua para poder detectar las convulsiones y tratar al paciente. Aunque perdió la vida producto de un infarto, ellos pudieron ver patrones rítmidos de ondas cerebrales alrededor del momento de la muerte.
Destacan que estos son parecidos los que ocurren durante los sueños, el recuerdo y la meditación.
Más sobre el estudio del cerebro y la muerte
Neurocientíficos registraron la actividad de un cerebro moribundo y encontraron estos patrones qúmicos de ondas cerebrales. Detallan que el cerebro puede permanecer activo y coordinado durante e incluso después de la transición a la muerte, y estar programado para orquestar toda la prueba.
"Medimos 900 segundos de actividad cerebral alrededor del momento de la muerte y establecimos un enfoque específico para investigar qué sucedió en los 30 segundos antes y después de que el corazón dejara de latir", dijo el Dr. Ajmal Zemmar, neurocirujano de la Universidad de Louisville, EE. UU. quien organizó el estudio.
Explicaron que antes y después que el corazón dejó de funcionar, vieron cambios en una banda específica de oscilaciones neuronales. "Las llamadas oscilaciones gamma, pero también en otras, como las oscilaciones delta, theta, alfa y beta".
Los diferentes tipos de oscilaciones, incluido el gamma, están involucrados en funciones altamente cognitivas, como la concentración, el sueño, la meditación, la recuperación de la memoria, el procesamiento de la información y la percepción consciente, al igual que las asociadas con los flashbacks de la memoria.
A juicio de Zammar el cerebro podría estar reproduciendo en ese momento "un último recuerdo de eventos importantes de la vida justo antes de morir, similar a los informados en las experiencias cercanas a la muerte".
Zemmar planea investigar más casos y ve estos resultados como una fuente de esperanza. “Algo que podemos aprender de esta investigación es: aunque nuestros seres queridos tienen los ojos cerrados y están listos para dejarnos descansar, sus cerebros pueden estar reproduciendo algunos de los mejores momentos que vivieron en sus vidas”.