Papa Francisco se operará de una hernia abdominal, ¿cuáles son las causas?
La Casa Pontificia ha alegado "problemas de salud" en este parón de once días en la agenda del Papa.
La Prefectura de la Casa Pontificia, que gestiona la agenda de los papas, canceló toda la agenda de Francisco hasta el próximo 18 de junio debido a su operación de hernia abdominal.
El pontífice argentino afronta este miércoles una operación de hernia abdominal para la que recibirá anestesia general en el hospital Gemelli de Roma, según ha confirmado la Santa Sede en un comunicado.
La intervención quirúrgica será llevada a cabo por el equipo del cirujano Sergio Alfieri, que ya le operó hace dos años del colon.
Francisco, de 86 años, se someterá a una laparotomía debido a una hernia incisional abdominal, probablemente producida tras su operación de colon de hace dos años, pues podría causarle una obstrucción intestinal.
DETALLES DE LA OPERACIÓN DEL PAPA FRANCISCO
El Vaticano explicó que "la operación, dispuesta en los últimos días por el equipo médico que asiste al papa, se ha hecho necesaria a causa de una hernia incisional incarcerada que está provocando síndromes suboclusivos recurrentes, dolorosos y que empeoran".
La operación ha sido considerada de urgencia después de los resultados del TAC y se produce después de la intervención de colon de julio de 2021.
Francisco fue operado del colon por diverticulos en el mismo hospital romano el 4 de julio de 2021 y dado de alta después de 10 días, a los que siguió una lenta recuperación.
Se trata de la tercera vez que el papa es internado en el hospital romano, pues estuvo ingresado tres noches a finales de marzo en el hospital Gemelli de Roma por “una pulmonía aguda”.
El papa demás sufre el problema de su rodilla derecha que le obliga a andar con bastón o con silla de ruedas y ha asegurado en varias ocasión que no se quiere operar.
Según TuaSaude, la hernia puede apaecer cuando se debilita el tejido abdominal y puede ser genético, o surgir luego de un aumento de la presión de la zona abdominal.
También puede deberse a un esfuerzo, debido a la obesidad o al embarazo.