Resistencia a los antibióticos: ¿Los utilizas de manera incorrecta?

Los antibióticos son medicamentos importantes y de gran beneficio para el tratamiento de infecciones bacterianas, prevención de propagación de enfermedades y disminución de complicaciones graves de algunos padecimientos, señala Clínica Mayo.

Sin embargo, no son recomendados para cualquier caso. Por esto, especialistas hacen énfasis en darles un buen uso y no abusar de ellos, pues la resistencia a los antibióticos es problema para la salud que causa gran preocupación en el mundo. 

¿Cuándo utilizar antiobióticos?

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) subrayan que los antibióticos son necesarios en caso de infecciones causadas por bacterias. 

Un artículo de los CDC sobre el buen uso de estos medicamentos destaca:

Dependemos de los antibióticos para tratar infecciones graves, como la neumonía, y afecciones que pueden poner en riesgo la vida, incluida la septicemia, que es la respuesta extrema del cuerpo a una infección".

Asimismo, apuntan que los antibióticos son eficaces para personas que tienen un alto riesgo de contraer infecciones, como son:

• Pacientes que van a ser operados
• Pacientes con enfermedad renal terminal 
• Pacientes que reciben quimioterapia

¿Cuándo NO son necesarios los antibióticos?

Los antibióticos se utilizan para tratar infecciones bacterianas y no virales. 

Clínica Mayo comparte el siguiente ejemplo:

Un antibiótico es el tratamiento adecuado para la amigdalitis estreptocócica, causada por la bacteria Streptococcus pyogenes. Sin embargo, no es el tratamiento correcto para la mayoría de los dolores de garganta, que son provocados por virus.

Otras infecciones virales frecuentes que no requieren tratamiento con antibióticos son:

• Resfriado
• Gripe
• Bronquitis
• Mayoría de casos de tos
• Algunas infecciones de oído
• Algunas infecciones de los senos paranasales
• Gastroenteritis viral

Es importante destacar que tomar un antibiótico para tratar una infección viral no será de gran ayuda porque:

• No curará la infección
• No evitará que otras personas se contagien
• No los ayudará a ti ni a tu hijo a sentirse mejor
• Puede provocar efectos secundarios innecesarios y perjudiciales
• Promueve la resistencia a los antibióticos

Los CDC también mencionan que cuando se toman antibióticos que no son necesarios, pueden surgir efectos secundarios. Los más comunes incluyen:

• Sarpullido
• Mareos
• Náuseas
• Diarrea
• Infecciones por hongos (candidiasis)
• Entre los efectos secundarios más graves se incluye la infección por Clostridium difficile (también llamada C. difficile o C. diff), que causa diarrea y puede dañar gravemente el colon y provocar la muerte.
• También pueden tener reacciones alérgicas graves y potencialmente mortales

Resistencia a los antibióticos

Cuando una persona que tiene una infección viral toma un antibiótico, este atacará las bacterias presentes en el cuerpo, incluso las beneficiosas o las que no causan la enfermedad. 

Este tratamiento mal dirigido puede hacer que las bacterias inofensivas desarrollen propiedades resistentes a los antibióticos que pueden traspasar a otras bacterias, o que sean reemplazadas por bacterias potencialmente dañinas, señalan los CDC. 

La resistencia a los antibióticos cuando se tiene una infección también puede presentar otras consecuencias como: 

• Enfermedades más graves
• Recuperación más prolongada
• Hospitalizaciones más frecuentes o más prolongadas
• Más consultas con el médico
• Tratamientos más caros

Un problema de salud mundial

Un artículo publicado por UNAMGLOBAL subrayó que la resistencia antimicrobiana o RAM podría llevar a la sociedad a una era post-antibiótica, en donde las infecciones simples se vuelvan intratables o incluso fatales.

En ese sentido, Ana Ocaña,  gerente Senior de Asuntos Médicos de RB México, apuntó que para el año 2050 se estima que 10 millones de personas parecerían esta situación, similar al número de pacientes con cáncer en 2014.

Ante esta situación, Ocaña señaló que la resistencia antimicrobiana es un problema de salud pública mundial que se acelera por el mal empleo de los antibióticos, por lo que instituciones a nivel mundial, como la Organización Mundial de la Salud, han reconocido este rubro como una importante amenaza y toman medidas para hacerle frente.