¿Existe asociación entre comer rápidamente y el aumento de peso?
Cuando comemos rápidamente, es más probable que consumamos una mayor cantidad de alimentos
De acuerdo con un estudio comer rápido podría estar relacionado con un mayor riesgo de padecer enfermedades como la obesidad. Los investigadores de la Universidad de Japón estudiaron a 59 mil 717 personas con diabetes tipo 2, mismos que describieron su forma de comer.
La investigación reveló que aquellos que comían más lentamente tenían menor riesgo de ser obesas, frente a las personas que se consideraron como comedores medianos, sin embargo el riesgo aumentaba para aquellos que estaban dentro del grupo de los que comían de manera acelerada.
Según la Dra. Leslie Heinberg, PhD, MA, quien no participó en el estudio, indica que las señales de hambre pasan del estomaga hasta el cerebro, mismo que tarda alrededor de 20 minutos en apagar el impulso de comer. Entonces al comer rápido, tiene la posibilidad de ingerir más alimentos en esos 20 minutos.
La velocidad de la alimentación
En el mismo sentido, otra investigación demostró que la reducción de la velocidad de alimentación suprimió el aumento de peso y previno la obesidad.
“Las personas deberían tomarse más de 20 minutos para comer, idealmente alrededor de 30 minutos, para que su cerebro tenga la oportunidad de ponerse al día con su estómago”, dice la Dr. Heinberg.
Con la intención de prevenir la obesidad, la especialista brinda algunos consejos relacionados con la forma de alimentación que pueden ser útiles para disminuir significativamente el exceso de alimentos debido a una velocidad acelerada de alimentación.
- Use un temporizador o mire el reloj para alargar su comida a 30 minutos
- Trate de masticar cada bocado entre 15 y 30 veces, dependiendo de la comida.
- Tome sorbos de agua cada pocos tragos. Esto también puede ayudarlo a sentirse más lleno.
- Baje la mano o el tenedor entre cada bocado.
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