¿Qué le puede pasar al cuerpo si se consumen refrescos de dieta con frecuencia?
Hay quienes piensan que es una mejor opción consumir refrescos de dieta que su versión regular.
Algunas personas piensan que es una mejor idea recurrir al consumo de refrescos de dieta en lugar de su versión regular, sin embargo, tal vez no sea la mejor decisión ni la más saludable.
Un artículo de Cleveland Clinic explica que probablemente muchas personas se preguntan qué es exactamente lo que están poniendo en su cuerpo al beber sodas de dieta y aunque esta opción de bebidas puede ofrecer una disminución de calorías a corto plazo, el organismo no se dejará engañar por mucho tiempo.
La dietista registrada Susan Campbell, de esta clínica, menciona que la investigación sugiere que el cuerpo reacciona a ciertos alimentos no nutritivos, incluidos los edulcorantes artificiales que se encuentran en los refrescos de dieta, de formas que pueden dañar la salud.
¿QUÉ LE PASA AL CUERPO AL TOMAR SODA DE DIETA?
De acuerdo con Campbell, esto es lo que sucede si se toman con frecuencia o todos los días este tipo de refrescos:
- Relación con el aumento de peso
Algunas investigaciones sugieren que el cerebro reacciona a los edulcorantes artificiales de la misma manera que lo hace con los dulces azucarados. Ingerirlos con frecuencia puede aumentar el deseo de alimentos ricos en calorías, lo que se traduce en un mayor riesgo de aumentar de peso.
Otra investigación encontró que las personas con sobrepeso u obesidad que cambiaron a refrescos de dieta probablemente consumieron más calorías en los alimentos que las personas con sobrepeso u obesidad que bebieron refrescos regulares.
- Pueden causar confusión con la insulina
El cerebro normalmente relaciona "dulce" con calorías. En el ámbito de la fisiología humana, eso es algo bueno porque impulsa al cuerpo a liberar insulina como acompañante del azúcar a las células para crear combustible.
Sin embargo, de acuerdo con la dietista de Cleveland Clinic, un estudio encontró que el proceso podría suceder de todos modos.
En el estudio, las personas que consumieron un edulcorante artificial, específicamente sucralosa, tuvieron aumentos en los niveles de insulina y glucosa en sangre, lo que se ha relacionado con resistencia a la insulina y un riesgo mayor de diabetes tipo 2.
- Cambiar la reacción de su cerebro a la dulzura
De acuerdo con la especialista de Cleveland Clinic, también existe evidencia que sugiere que quienes beben refrescos de dieta tienen una mayor actividad en el área del cerebro asociada con el deseo de consumir alimentos con alto contenido de grasa y azúcar.
Beber refrescos dietéticos parece alterar el centro de recompensas de percepción dulce del cerebro.
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