¿Por qué se busca comer de más cuando hay estrés?

La psicóloga  Susan Albers, PsyD de Cleveland Clinic explicó que cuando una persona está estresada o abrumada,  el cuerpo bombea cortisol, una  hormona que activa los instintos de lucha o huida.

Los factores estresantes pueden desencadenar producción de cortisol son mucho menos amenazantes que los animales salvajes de antaño. Aún desencadenan los mismos instintos de lucha o huida y el mismo deseo de recurrir a la comida.

“Puede notar que se siente atraído por cierto tipo de comida cuando está estresado, como el chocolate o la sal”, señala Albers, “y ciertos alimentos están relacionados con los sentimientos de la infancia”. 

Investigaciones muestran que comer por estrés solo nos hace sentir mejor durante unos tres minutos. “Eso no es muy largo ni vale la pena después”, dice Albers.

Cuando se come por estrés, se trata de escapar de los sentimientos. “Así que la clave para controlarlo es comprender mejor su estrés”.

RECOMENDACIONES PARA CONTROLAR EL ESTRÉS POR COMER 

1. Pausa para la atención plena:  La atención plena es un antídoto para comer por estrés.  Hay que aplicar la técnica llamada Stop.

Tome un respiro.
Elija una opción que se adapte a sus sentimientos, ya sea comida o una actividad relajante.

2. Averiguar qué le tranquiliza: Cuando se está estresado, se necesita calma, no placer. 

• Cinco personas  a las que se puede llamar cuando se sienta deprimido, molesto o necesite desahogarse (amigo, padre).
• Cinco formas en las que le guste relajarse (tomar una ducha caliente, poner los pies en alto.)
• Cinco lugares a los que se va para calmarse ( cama, parque favorito.)
• Cinco cosas que se puede decir a ti mismo ("Puedo hacer esto", “Esto pasará”.).
• Cinco actividades que puedes hacer para distraerte (hacer un rompecabezas, ver una película, hacer un mandado.).

3. Probar una técnica de respiración para aliviar el estrés:  Sugiere una técnica llamada “respiración con escobilla de goma”. Consiste en:  

Cerrar los ojos y respira hondo, imaginando una escobilla de goma que comienza en la parte superior de la cabeza.
Exhala lentamente, imaginando la escobilla de goma empujando el estrés desde la parte superior de la cabeza hasta la punta de los dedos de los pies y fuera de tu cuerpo.
Repita este proceso tres veces.

4. Hacer una taza de té negro:  Se ha demostrado que reduce los niveles de cortisol. 

5. Dar un masaje en los pies  “Cuando experimente la necesidad de comer estresado, pruebe el automasaje como una versión menos costosa y bajo demanda de una cita en el spa”, sugiere Albers.

6. Tranquilízarse con canela: Es un agente de calentamiento que puede ayudar a relajar y calmar los músculos.

Pero si se está luchando con estrés frecuente, fuera de control o problemas de alimentación y parece que no puede parar, puede ser el momento de traer a un experto.