¿Por qué no se debe beber el agua de la lluvia? Un académico lo explica
No es buena idea utilizar el agua de lluvia para beber.
Llover puede causar regocijo en algunas personas, incluso hay a quienes les provoca levantar la cabeza y beber las gotas de agua que caen del cielo.
De acuerdo con el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), también hay personas que, con la mejor intención, recolectan el agua de la lluvia para su uso diario, sin embargo, este organismo destaca que no es buena idea utilizarla para beber.
¿POR QUÉ NO ES BUENO BEBER EL AGUA DE LA LLUVIA?
El académico del CIAD, Cristóbal Chaidez Quiroz, explica que el agua de la lluvia podría ser un riesgo para la salud, debido a que en ella se han detectado los llamados “químicos para siempre” o PFAS.
El director general del laboratorio Nacional para Investigación en Inocuidad Alimentaria (Laniia)señala que las sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS, por sus siglas en inglés), según la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), “son un grupo de agentes químicos que incluye PFOA, PFOS, GenX, y muchos otros que se han fabricado y utilizado en una variedad de industrias en todo el mundo desde 1940. De estos agentes químicos, el PFOA y el PFOS han sido los más producidos y estudiados”.
El especialista detalló que hay evidencia científica que sostiene que los PFAS no se degradan y pueden acumularse con el paso del tiempo, y se han asociado como causa de infertilidad, cáncer y retrasos en el desarrollo de los niños.
Los PFAS se encuentran en el agua, suelo, aire y alimentos. También en envases de alimentos de papel/cartón, en envoltorios de comida rápida, bolsas de palomitas de maíz para microondas, recipientes de cartón para llevar y bolsas de alimentos para mascotas, pues tienen el fin de evitar que el aceite y la grasa de los alimentos se filtren a través del empaque".
El especialista en inocuidad alimentaria explicó que los PFAS se continúan produciendo y están presentes en la mayoría de los productos comerciales e industriales.
Asimismo, mencionó que, para cuidar de la salud, se debe considerar la instlación de un tratamiento de agua en el hogar (por ejemplo, filtros a base de carbón activado) que esté certificados para reducir los niveles de PFAS.
El académico de la Coordinación Regional del CIAD en Culiacán añadió que una buena recomendación es utilizar recipientes metálicos y de vidrio para el transporte de los alimentos, y si se desea saber si tenemos un exceso de PFAS en el organismo, cualquier persona se puede acercar a un laboratorio y solicitar un análisis cromatográfico para conocer los niveles presentes en sangre (suero).
No obstante, no existe ningún tratamiento para expulsar estas sustancias del organismo, por lo que lo mejor que se puede hacer es evitar la exposición a dichos compuestos.