Entrenamiento seguro: Claves imprescindibles para prevenir lesiones en el gimnasio
Aprende cómo evitar lesiones en el gimnasio mientras te adentras en un viaje de transformación física y mental.
Cuando comienzas adentrarte al mundo del gimnasio, es indispensable adaptar medidas que puedan ayudar a la prevención de las lesiones; todo esto con el objetivo de garantizar una experiencia segura y efectiva dentro de las instalaciones.
Las lesiones deportivas pueden afectar a cualquier persona que hace ejercicio. Estas pautas nos permitirán proteger nuestro cuerpo así como mantener un compromiso constante con nuestro régimen de ejercicios.
A continuación exploraremos detalladamente algunas claves esenciales que nos ayudarán a prevenir lesiones en el gimnasio.
¿Cómo evitar lesiones?
Calentamiento: Antes de comenzar cualquier ejercicio intenso, dedica algunos minutos a calentar tus músculos con ejercicios cardiovasculares suaves. El calentamiento tiene varios beneficios, como: mayor flujo de sangre y oxígeno a los músculos, mayor flexibilidad (si haces estiramientos) y mayor relajación y concentración.
Estiramiento: De acuerdo con el Seguro de Salud Internacional muchas de las lesiones deportivas más frecuentes ocurren por la falta de flexibilidad, es por ello que se recomienda estirar los músculos suave y lentamente, al punto de tensión y mantenlos estirados durante al menos 30 segundos.
Buena técnica: Es importante realizar el entrenamiento de una manera segura y adecuada, pues de no hacerlo de la manera correcta aumenta la posibilidad de lesiones. Por lo que en caso de no estar seguro de cómo hacer un ejercicio, lo mejor será asesorarse.
Progresión gradual: Se paciente, ve con calma y no te exijas demasiado. A medida que pasa el tiempo podrás ir incrementando la intensidad, peso y duración de los ejercicios de forma gradual, esto permite que tus músculos, articulaciones y tendones se adapten de manera segura.
Enfriamiento: Tras tu sesión de ejercicios, es recomendable destinar de cinco a quince minutos para llevar a cabo un período de enfriamiento. Con actividades como: caminar, y realizar estiramientos dirigidos a los grupos musculares que has trabajado durante tu entrenamiento.