Cómo detectar trastornos alimenticios y que problemas de salud pueden ocasionar

Los trastornos alimenticios son problemas de origen multifactorial (biológico, psicológico, familiar y sociocultural) que se asocian a un comportamiento disfuncional frente al consumo de alimentos y una obsesión por el peso. Se puede comer menos o mucho más de lo necesario, dando como resultado una insatisfacción con la imagen corporal.

Los también llamados trastornos de conducta alimentaria (TCA) que son más conocidos son la anorexia nerviosa, la bulimia y el trastorno por atracón. Estos TCA llegan a repercutir de manera negativa en la persona que lo sufre y sus consecuencias no solo son físicas al afectar la capacidad del cuerpo para nutrirse y aumentar el riesgo de enfermedades cardiacas o renales, sino también psicológicas y sociales.

Cabe mencionar que los desórdenes de la alimentación pueden afectar a cualquier persona, tanto hombres como mujeres de cualquiera edad, aunque se observa una mayor prevalencia en mujeres y son más frecuentes en la adolescencia.

¿Cómo identificar un trastorno alimenticio o desorden de alimentación?

Las personas que padecen un trastorno alimenticio pueden llegar a ser poco conscientes de su problemática, por ello, la familia y otras personas cercanas juegan un rol importante para detectar un TCA a tiempo.

Es importante saber que los desórdenes de la alimentación no aparecen de golpe, sino que comienzan sutilmente y pueden pasar desapercibidas durante un largo tiempo, pues las personas afectadas hacen todo lo posible para llamar la atención.

Los síntomas de los los trastornos alimenticios pueden variar según sea el TCA.

En el caso de los atracones de comida, las señales o síntomas incluyen:

• Comer cantidades inusualmente grandes de alimentos en un período de tiempo específico, por ejemplo en un periodo de 2 horas
• Comer incluso cuando está lleno o no tiene hambre
• Comer rápido durante los episodios de atracones
• Comer hasta que esté incómodamente lleno
• Comer solo o en secreto para evitar la vergüenza
• Sentimientos de angustia, culpa o pena por la alimentación
• Estar frecuentemente en dieta sin pérdida de peso

S el caso de la bulimia nerviosa, los síntomas pueden ser similares a los de los atracones, además de tratar de deshacerse de la comida o peso después de el consumo excesivo de alimentos.

• Vomitar o utilizar laxantes o enemas para acelerar el tránsito de los alimentos
• Hacer ejercicio muy intenso y en exceso
• Ayuno

Los síntomas de la anorexia nerviosa incluyen:

• Comer muy poco, hasta el extremo de morir de hambre
• Ejercicio intensivo y excesivo
• Delgadez extrema
• Miedo intenso a subir de peso
• Tener una imagen corporal distorsionada. Verse con sobrepeso a pesar de ser extremadamente delgado

Otras señales para identificar un trastorno de alimentación son:

• Ocultan la forma de su cuerpo con prendas anchas o muchas capas de ropa
• Se niegan a hacer actividades donde sea necesario mostrar el cuerpo, como ir a la playa
• Se pesan mucho o tienen miedo a la báscula
• Se muestran nerviosos o inquietos si no hacen ejercicio
• Evitan las comidas sociales
• Tienen cambios de humor muy buscos o están ansiosos e irritabes
• Pasan mucho tiempo visitando sitios relacionados con el cuerpo  y la alimentación
• Muestran insatisfacción personal constante
• Tienen dificultades para concentrarse

¿Qué problemas de salud causan los TCA?

En el caso de la bulimia nerviosa, ésta puede ocasionar problemas de salud como inflamación y dolor de garganta crónico; glándulas salivales inflamadas en la zona del cuello y la mandíbula y el esmalte dental se puede desgastar, además de ocasionar que los dientes se vuelvan cada vez más sensibles y con caries.

Otros problemas de la bulimina nerviosa son la enfermedad por reflujo gastroesofágico y otros problemas gastrointestinales, así como deshidratación severa y desequilibrio de electrolito, el cual puede ocasionar un derrame cerebral o un ataque al corazón.

Por otro lado, la anorexia nerviosa puede ocasionar problemas de salud como: Una baja densidad ósea, anemia leve, pérdida muscular y debilidad, cabello y uñas finas y quebradizas, piel seca o amarillenta y seca, crecimiento de vello fino en el cuerpo, estreñimiento severo, presión arterial baja, respiración y pulso lento, sensación de frío, infertilidad, daño cerebral y falla multiorgánica.

Es importante saber que la anorexia nerviosa puede llegar a ser fatal debido a que algunas personas mueren por complicaciones por inanición, mientras que algunas otras por suicidio. Además, muchos de quienes los padecen pueden llegar a sufrir depresión o ansiedad.

En caso de que alguien cercano a ti presente alguna de estás señales es importante buscar asesoría profesional para primero saber cómo ayudar a la persona que está viviendo un trastorno alimenticio.

Con información de MedlinePlus y Centro Julia Farré