¿Cómo afecta la viruela del mono a los niños?
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Es importante evitar que los menores se rasquen las lesiones | Especial
A medida que los casos de viruela del mono siguen en aumento, hemos visto cómo se han manifestado algunos casos positivos en niños.
“Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) han enfatizado que la viruela del simio puede afectar a cualquiera que tenga contacto cercano con personas que tienen la viruela del simio, y esto incluye a los niños”, dijo la portavoz de los CDC, Kristen Nordlund, a TODAY.
Sin embargo, los expertos dicen que los padres no deberían preocuparse demasiado de que sus hijos contraigan el virus, a menos que ellos mismos tengan viruela del simio, que podrían contagiar fácilmente a sus hijos.
Por otro lado, el Dr. Buddy Creech, experto en enfermedades infecciosas pediátricas dijo que los niños que podrían estar en mayor riesgo de enfermedad grave en caso de ser contagiados son los menores de ocho años.
“Tienden a experimentar complicaciones como neumonía e inflamación cerebral. Las llagas pueden infectarse y causar celulitis y sepsis. La razón por la que los niños son más propensos a desarrollar celulitis y/o sepsis es que a los niños más pequeños les cuesta más no rascarse las lesiones”.
¿Cómo proteger a los menores de la viruela del mono?
Creech dijo que el primer paso para mantener a salvo a los menores es cuidarse a ellos mismos, pues de no ser así ellos contagiarían a sus hijos.
Las recomendaciones de los CDC para protegerse de la viruela del mono incluyen:
- Evite el contacto piel con piel con personas que tengan un sarpullido que se parezca a la viruela del simio o que se haya confirmado, incluidos los besos, los abrazos, las caricias y las relaciones sexuales.
- Evite el contacto con objetos o materiales que haya usado una persona con viruela del simio, como utensilios, vasos, ropa de cama, toallas o prendas de vestir.
- Practique una buena higiene de manos, especialmente antes de comer o tocarse la cara y después de ir al baño.
También es importante que los padres reconozcan los diferentes síntomas de la viruela del mono además de la erupción, los cuales pueden ser fiebre, malestar general, dolor de cabeza, dolor de garganta, tos e inflamación de los ganglios linfáticos.
Cuando un niño es contagiado por la viruela del mono, la persona encargada de cuidarlo deberá evitar que se rasque las lesiones o se toque los ojos. Los médicos también deben cubrir las áreas de piel lesionada del niño con vendajes cuando sea posible y evitar el contacto directo con la erupción.
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