El hombre que vivió 35 años con un diagnóstico erróneo de cáncer terminal
Fue diagnosticado equivocadamente con un cáncer terminal a los 15 años de edad
Un hombre de Estados Unidos pasó gran parte de su vida pensando que en cualquier momento podría morir, pues había sido diagnosticado con un cáncer terminal que nunca tuvo.
Fue en el año 1986, cuando Jeff Henigson con 15 años de edad recibió una noticia que le cambiaría la vida. Tras un accidente en bicicleta, Henigson, tuvo que ser operado y diagnosticado con un agresivo cáncer cerebral que terminaría con su vida.
El cáncer con el que fue diagnosticado se denomina "astrocitoma anaplásico" Jeff compartió para The Washington Post, que le advirtieron que le quedaba poco tiempo de vida, por lo cual fue sometido a quimioterapias e intentó en aprovechar los meses que le quedaban de vida.
Sin embargo, los meses pasaron y el caso de Jeff fue considerado como milagroso
Falso diagnóstico
Años después, Jeff recibió un correo electrónico de un neuropatólogo jubilado de Nueva Jersey, cuyo trabajo se centró en los astrocitomas anaplásicos, Karl Schwarz, quien se interesó en su caso.
Schwarz, le explicó en el correo que en su carrera solo había visto que tres pacientes “sobrevivieron más allá de la esperanza de vida de un diagnóstico correcto”. Entonces le pidió la oportunidad de acceder a sus archivos médicos.
Después de una revisión de documentos, Schwarz concluyó que a Jeff le habían dado un “diagnóstico falso”” y que debieron haberle dado una segunda opinión.
Ante ello, Jeff quiso interponer una demanda por el diagnóstico erróneo, pero fue imposible, debido a que pasaron muchos años. Ahora se dedica a compartir su historia y el calvario que vivió pensando que moriría pronto.
¿Qué es el astrocitoma anaplásico?
El astrocitoma es un tipo de cáncer que se puede formar en el cerebro o en la médula espinal. Los astrocitomas se forman en células denominadas astrocitos que proporcionan apoyo a las neuronas.
De acuerdo con Mayo Clinic, los signos y síntomas del astrocitoma dependen de la ubicación del tumor.
- Los astrocitomas presentes en el cerebro pueden provocar convulsiones, dolores de cabeza y náuseas.
- Los astrocitomas que se forman en la médula espinal pueden provocar debilidad y discapacidad en la zona afectada por el tumor en crecimiento.
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