Sarampión, una enfermedad altamente peligrosa sobre todo en menores de cinco años
El sarampión aunque es una enfermedad bastante contagiosa causada por un virus que se reproduce en la nariz y garganta del niño o adulto infectado, la misma se puede prevenir.
La infección por el sarampión puede producirse por etapas en un período de dos a tres semanas. | Pixabay.
Actualmente el sarampión se puede evitar gracias a una vacuna, sin embargo en niños pequeños, menos de cinco años puede ser grave y mortal.
Aunque las tasas de mortalidad se han reducido en todo el mundo a medida que se administra la vacuna contra el sarampión a más niños, la enfermedad aún mata a más de 100.000 personas cada año, la mayoría menores de 5 años.
Las gotas infectadas también pueden depositarse sobre una superficie, donde permanecen activas y contagiosas durante varias horas.
Síntomas del sarampión
Pueden los signos y síntomas del sarampión aparecer entre 10 y 14 días después de la exposición al virus. Generalmente son los siguientes:
- Fiebre
- Tos seca
- Goteo nasal
- Dolor de garganta
- Ojos inflamados (conjuntivitis)
- Manchas blancas diminutas con centro blanco azulado y fondo rojo dentro de la boca.
- Sarpullido constituido por manchas grandes y planas
La infección por el sarampión puede producirse por etapas en un período de dos a tres semanas.
Alrededor del 90 % de las personas susceptibles que se exponen a alguien con el virus se infectarán. Lo que debes saber es que si no estás previamente vacunado es mucho más probable que te contagies de la enfermedad.
Si tienes deficiencia de vitamina es más probable que tengas síntomas más graves y complicaciones.
Recomendaciones para tratar el sarampión
Si tú o tu hijo tienen sarampión, mantente en contacto con tu médico mientras controlas el avance de la enfermedad y presta atención a las complicaciones. Prueba también estas medidas de comodidad:
- Tómalo con calma. Descansa y evita las actividades ajetreadas.
- Bebe algo a sorbos.
- Busca alivio respiratorio. Usa un humidificador para aliviar la tos y el dolor de garganta.
- Descansa la vista. Si a ti o a tu hijo les molesta la luz brillante, mantén las luces bajas o usa lentes de sol.
- Además, evita leer o mirar televisión si la luz de una lámpara de lectura o de la televisión te resulta molesta.
Con información de Mayo Clinic.
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