¿Tronarse el cuello es un hábito peligroso?
Tronarse el cuello puede parecer gratificante en el momento, pero es importante considerar sus posibles consecuencias
El alivio momentáneo que se obtiene al tronarse el cuello puede derivar a problemas subyacentes | Klara Kulikova/PEXELS
La tensión emocional y la presión pueden causar molestias musculares en la espalda y cuello. En respuesta a estas situaciones, muchas personas tienden a buscar alivio tronando las articulaciones en estas áreas, pero según expertos este hábito podría conllevar a riesgos.
El sonido tronante que se escucha cuando se suenan las articulaciones viene de los tendones o de los músculos que se mueven sobre la articulación o del reventar de las burbujitas de nitrógeno que normalmente se encuentran en el espacio de las articulaciones, explica José Mena, M.D., especialista intervencionista de la columna con Miami Orthopedics & Sports Medicine Institute.
Tronarse el cuello con frecuencia puede ser perjudicial para la salud. Tronar o hacer crujir el cuello involucra el movimiento brusco de las articulaciones del cuello, lo cual puede tener varias consecuencias negativas.
Los riesgos de tronarse el cuello
Tronarse el cuello puede volverse dañino cuando no lo hace correctamente o lo hace con mucha frecuencia. El Dr. Kephra Froehlich, quiropráctico dice que cuando se cede a la necesidad de crujir mucho el cuello, los ligamentos de las articulaciones pueden estirarse de forma permanente. Esto se llama inestabilidad perpetua. Cuando esto sucede, las articulaciones de su cuello corren más riesgo de desarrollar osteoartritis.
Realizar este hábito con demasiada fuerza podría afectar los nervios del cuello y puede ser extremadamente doloroso y provocando que sea difícil o imposible mover el cuello, también puede tensar los músculos alrededor de las articulaciones y las propias articulaciones.
Además, si el sonarse las articulaciones constantemente se ve acompañado por dolor o inflamación, esto puede ser señal de que algo no está bien y usted debe consultar con su médico. Lo mejor de todo, es evitar tronarse el cuello y en caso de sentir molestias o rigidez se recomienda buscar el consejo médico de un profesional de salud.
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