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Alimentación

Alimentos con moho: ¿Qué descartar y qué conservar?

La decisión sobre qué hacer con alimentos mohosos varía según su tipo y consistencia

Por Kimberly Salazar

En ocasiones, eliminar completamente el moho es difícil(UNAM)

En ocasiones, eliminar completamente el moho es difícil | UNAM

Ciudad de México.- El moho en alimentos es un tipo de hongo microscópico que crece en diversas superficies orgánicas, especialmente en alimentos. Se manifiesta como manchas de diferentes colores (verde, blanco, negro, etc.) y texturas, y su presencia puede resultar en la alteración del sabor, olor y textura de los alimentos.

El moho puede penetrar fácilmente en algunos alimentos, por lo cual seguramente en más de una ocasión, te has preguntado que hacer con esos alimentos mohosos. Un artículo de la Universidad Nacional de México (UNAM), explica si debemos concervar o desechar los alimentos.

El descubrimiento de moho en un alimento puede indicar la presencia de bacterias. FOTO: Archivo GH
El descubrimiento de moho en un alimento puede indicar la presencia de bacterias. FOTO: Archivo GH

Según información compartida por la UNAM, la decisión varía según el tipo de alimento. 

En productos duros o compactos como el queso firme o las zanahorias, cortar la parte afectada junto con un poco más suele ser suficiente.

Por otro lado, en alimentos más húmedos como quesos blandos, yogur, mermeladas, encurtidos y humus, la extensión del moho es menos visible y más difícil de eliminar por completo. Por seguridad, es mejor desechar estos alimentos.

Lo mismo se aplica a las carnes y pescados. Una vez mohosos, congelarlos o cocinarlos únicamente elimina el hongo, pero las toxinas que producen permanecen intactas.

El pan también debe descartarse, ya que es imposible determinar la extensión interna del moho. En cuanto a las bayas, si solo unas pocas tienen moho, puedes desecharlas y lavar las demás; sin embargo, si hay más afectadas, el riesgo aumenta.

Sin embargo, si se ingiere moho accidentalmente, lo más probable es que no sea tóxico y una pequeña cantidad no resulte dañina. No obstante, los expertos sugieren estar atentos a síntomas como náuseas, diarrea y dificultad para respirar.
 

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