Chamoy casero de flor de jamaica, prepara esta versión saludable para tus botanas
Cada vez son más las personas que cuidan la manera en que se alimentan y buscan opciones más saludables para consumir, sin dejar de disfrutar sus comidas o botanas favoritas.
El chamoy es un acompañante para todo tipo de botanas. Es el favorito de muchos mexicanos porque atrapa al paladar con la combinación perfecta de dulce, acidito y picoso.
Se utiliza para realzar el sabor de frutas, verduras o frituras; espolvoreado o sólido sobre una paleta, nieve o raspado. Pero, ¿sabías que el chamoy no es de origen mexicano sino chino? El chamoy es tan popular entre los mexicanos que es difícil pensar que no se originó en el País Azteca.
Según Rachel Laudan, la primera historiadora de la comida en rastrear la historia del chamoy y autora del libro Cocina e Imperio, este aderezo se trata sólo de una versión mexicana de un albaricoque muy común en China llamado prunus mume.
Laudan señala que los asiáticos migraron a México en 1560 en barcos españoles y que intercambiaban seda y especias chinas por metales.
Fue así cómo según la escritora e historiadora llega a México este suculento aderezo que hace que quienes ya lo han probado, saliven solo al verlo.
En la actualidad, cada vez son más las personas que cuidan la manera en que se alimentan y buscan opciones más saludables para disfrutar sus comidas favoritas.
Aquí te compartimos una deliciosa receta de chamoy de jamaica, con la que podrás disfrutar de la misma manera y sin tanta culpa, tus botanas predilectas.
Chamoy de jamaica
- 2 tazas de jamaica
- 1 litro de agua
- 1/4 chile colorado
- Jugo de 3 limones
- 2 cucharaditas de sal del Himalaya
- 2 cucharaditas Tajín bajo en sodio (tapón azul)
- 20 sobres de stevia
Procedimiento:
- Hervir la jamaica con el agua por 5 minutos, retirar del fuego y dejar enfriar.
- Ya que esté frío, licuar la jamaica que hirvió junto con el agua.
- Colocas nuevamente la mezcla en la olla en que la herviste, a fuego lento y agregas el chile colorado, el jugo de los 3 limones, las 2 chucharaditas de sal del Himalaya, el Tajín bajo en sodio y los 20 sobres de stevia.
Tip: En caso de quedar muy espeso, puedes agregar más agua.
Con información del libro Gastronomía e Imperio de la autora Rachel Laudan.