Ojos lagañosos, ¿cuándo debes preocuparte?
Las lagañas suelen cumplir con una función protectora, sin embargo, debes estar pendiente de estos cambios.
Es normal despertar y tener lagañas en los ojos. En un principio no debería suponer ningún motivo de preocupación. Sin embargo, si esto es constante y va acompañado de un cambio en el color y la consistencia de las secreciones, es importante prestar atención, pues podría tratarse de una infección o una enfermedad ocular.
De acuerdo con especialistas de Clínica Baviera, las lagañas son conocidas como los "mocos en los ojos". Se trata de una combinación de mucosidad, aceite, células de la piel y otros desechos que se acumulan en el ojos cuando estamos durmiendo.
Como mencionamos en un principio, no suelen ser motivo de preocupación, pues su función es proteger. La lagaña se encarga de arrastrar hacia afuera del ojo los desechos y sedimentos que pueden resultar dañinos.
Sin embargo, estos cambios pueden ser indicadores de una infección:
- Lagañas abundantes o en exceso
- Cambia su color a uno verdoso o amarillento
- Pican o causan dolor
Según especialistas de esta clínica, los ojos lagañosos podrían ser síntoma de estos trastornos oculares:
- Conjuntivitis
- Blefaritis
- Orzuelo
- Úlcera corneal
- Dacriocistitis
¿Cómo tratar las lagañas?
Es importante retirar las lagañas lo más pronto posible. Se puede utilizar una gasa esterilizada empapada con un suero fisiológico o acudir con un especialista para que él brinde las recomendaciones adecuadas.
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