"Échale aguacate": Productores mexicanos aseguran que su cultivo sí es sustentable
Un reportaje señaló que chefs de diversas cocinas del mundo han pedido dejar de consumir aguacate por su impacto ambiental.
Un reportaje reciente publicado por The Guardian casi presagió el fin del consumo del aguacate en las cocinas a causa de la enorme huella de carbono que tiene su cultivo como fruta.
El reportaje señaló que en diversas cocinas del mundo, especialmente de Gran Bretaña, ha comenzado a prepararse el guacamole sin aguacate, es decir, una mezcla preparada con guisantes, habas u otros ingredientes con el objetivo de contrarrestar su impacto ambiental, pues cada fruto requiere hasta 230 litros de agua para crecer.
Sin embargo, el medio británico aclaró días después que está cifra es un ejemplo extremo específico pero no típico y que cada lugar del mundo tiene sus propios problemas particulares en la producción del aguacate.
El cultivo de aguacate en México
De acuerdo con El Financiero, el aguacate de Michoacán, principal estado mexicano donde se cultiva, está lejos de esa cantidad hídrica que mencionó el diario The Guardian.
Ante ello, la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM) reporta otras alternativas.
En entrevista, Juan Rafael Elvira, de la APEAM, destacó que el aguacate sí puede ser un fruto sustentable y aclaró que no está agotando el agua de la región, además de que tampoco se trata de agricultura intensiva.
"Es un cultivo que sí integra a los ejidos y comunidades indígenas y estamos trabajando en pro del medio ambiente", explicó.
Ante el llamado a dejar de consumir aguacate, según The Guardian, como una solución, el presidente de la APEAM, José Luis Gallardo, señaló que para los productores mexicanos no sería una solución y la tendencia continúa siendo "échale eguacate".
Esto se debe a que en México se sigue produciendo un aguacate sano, limpio, sin uso de agua si no es temporal (de lluvia).
De acuerdo con Gallardo, la tendencia de #NoAvocado como solución a contrarrestar el impacto ambiental le correspondería responder a los países que consumen demasiada agua para el cultivo del llamado "oro verde".