Virus del herpes genital evoluciona más rápido que el labial, ¿cuales son los síntomas?
El virus del herpes simple es uno de los patógenos humanos más prevalentes a nivel mundial.
Un estudio español encontró que los virus humanos de herpes simplex mutan "in vitro" de una manera más rápida de lo que se tenía pensado.
Esto indicaría que el virus que ocasiona el herpes genital es capaz de evolucionar con mayor rapidez que su homólogo labial en cultivo celular.
La investigación, del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CISC) y que publica Plos Pathogens, cuestiona la alta estabilidad genómica atribuida a estos virus y pueden tener implicaciones en el desarrollo de antivirales y el uso de estos a largo plazo.
Acumulan cambios
El virus del herpes simple es uno de los patógenos humanos más prevalentes a nivel mundial, para el cual no existe cura o vacuna, y tradicionalmente se pensaba que estos virus de ADN evolucionaban muy lentamente.
Sin embargo, los especialistas descubrieron que ambos tipos de herpes simplex, el tipo 1 o herpes labial y el tipo 2 o genital, acumulan cambios cuando replican en cultivo celular.
El investigador Antonio Alcamí, del Centro de Biología Molecular Severo Ochoa (CBM-CSIC-UAM), explicó que esta circunstancia puede incluso hacer cambiar su fenotipo muy rápidamente".
Los resultados son fruto de la optimización de análisis bioinformáticos y de técnicas de ultrasecuenciación masiva, que son fundamentales para entender la forma en la que estos patógenos humanos evolucionan durante la replicación viral en diferentes tejidos.
Todo ello podría ayudar a identificar factores de virulencia y a controlar o reducir la generación de resistencia a los antivirales que se usan para tratar el herpes labial y genital en los pacientes, explica el CSIC en un comunicado.
Herpes genital
En el caso del herpes genital, Clínica Mayo explica que se trata de una infección de transmisión sexual frecuente ocasionada por el virus del herpes simple.
Tras la infección inicial, el virus permanece inactivo en el cuerpo y puede reactivarse varias veces al año.
Esta infección puede provocar dolor, picazón y llagas en la zona genital, pero también es posible que no se tenga ningún síntoma. Una persona infectada puede contagiar aun cuando no tenga llagas visibles.