Delicia veraniega: Helado de duraznos con mermelada casera
La combinación perfecta de la suavidad de la crema y la dulzura de los duraznos frescos
El verano está por terminar, pero antes de que eso suceda deberías dedicar un día a preparar uno de los reconfortantes postres helados para terminar de manera dulce estos días calurosos.
El helado de durazno, con su dulce sabor a fruta fresca y su textura suave y cremosa, es una opción perfecta para refrescarse y satisfacer el antojo de algo dulce.
En esta receta, te mostraremos cómo preparar un exquisito helado de durazno desde cero, combinando la frescura de los duraznos con la suavidad de la crema y la leche condensada. Además, le añadiremos un toque de mermelada de durazno casera que intensificará aún más su sabor.
Un rico postre de temporada
Ingredientes:
- 1/2 Litro de crema para batir
- 1 Lata de Media Crema
- 1 Bolsita de Leche Condensada
- 4 Mitades de duraznos en almíbar
- 1/2 Taza de agua
- 1/4 De taza de azúcar refinada
- Colorante vegetal amarillo, para alimentos
- 1 Durazno rebanado
- 6 Cerezas en almíbar
Preparación:
1. Comienza haciendo el helado de durazno. En un recipiente adecuado, bate la crema hasta que duplique su volumen. Luego, incorpora la media crema y la leche condensada. Una vez que todo esté bien mezclado, vierte la mezcla en un refractario y cúbrelo con papel plástico autoadherente. Lleva al congelador y deja reposar durante una hora.
2. Para hacer la mermelada de durazno, coloca las mitades de durazno, el agua, el azúcar y el colorante vegetal en la licuadora. Procesa hasta obtener una mezcla homogénea. Luego, vierte esta mezcla en una olla y cocina a fuego medio, removiendo constantemente para evitar que se pegue, hasta que espese ligeramente. Una vez lograda la consistencia deseada, retira del fuego y deja enfriar.
3. Una vez que la primera hora de congelación del helado haya pasado, sácalo del congelador y, con la ayuda de un tenedor, mézclalo nuevamente. Luego, vierte la mezcla de durazno sobre el helado y mézclala suavemente.
Vuelve a poner el refractario en el congelador y déjalo reposar por al menos otra hora o hasta que el helado esté firme.